Anatomía patológica

INFORME:
Estimado Sr Gil:
Tenemos buenas noticias para usted, la mancha rosada en su pene, no era gangrena, sino lápiz labial.
Atte El equipo de patología.

P.D Lamentamos la amputación.

De compras

En un almacén de ropa femenina:
—Busco un regalo para mi esposa…
—Claro, "Majitus": ¡Tengo unas tangas divinas! Si quiere se las muestro...
—¡Bueno! ¡Pero, primero..., véndame el regalo!

Muestras para laboratorio

Un señor de edad avanzada va al médico a una revisión anual acompañado por su anciana esposa. Cuando el doctor entra a la sala de exámen le dice:
─Voy a necesitar su muestra de orina, de materia fecal y de esperma…
El anciano que estaba medio sordo le pregunta a su mujer:
─¿Qué quiere el doctor?
La mujer le susurra al oído:
 

¡Que le dejes... tus calzoncillos!

"Ogil" De viaje

Mientras mi hermano Óscar empacaba maletas para un viaje de trabajo, su hijo de tres años estaba encantado jugando en la cama. En un momento el niño le dijo:
—¡Mila e’to, papi! –y paró dos deditos de su mano.
Tratando de entretenerlo, Óscar le cogíó los deditos, se los metió a la boca, y le dijo:
—¡Me voy a co-mer es-tos de-diiiii-tos...! –y, dramatizando que se los tragaba, salió del cuarto.
Cuando regresó, el chico estaba parado en la cama mirándose con expresión de asombro los deditos que mi hermano –lleno de ternura– había humedecido con los labios; por lo que le preguntó:
—¿Qué pasa, hijito?
Y el pelado le respondió:
—¡Papi, papi!, ¿qué she hizho mi moquito, ahhh…?

¿Ocupado?

Estaba solo en el apartamento y una hermosa vecina golpea la puerta. Al abrir ella me dice:
─Estoy con unas ganas locas de divertirme, emborracharme y otras cosas más... ¡toditita la noche!, ¿tienes algún programa?
─¡Claro que no!
─¡Qué bueno!... Entonces, ¿puedes cuidar mi perrito?

Cansado

Una viejita le dice a su esposo: 
- Mijito, subamos al segundo piso, y hagamos el amor. 
Y él, algo cansado, le dice:
 

- Elige una de las dos cosas... ¡no puedo hacer las dos!

Experiencia

Primera noche de una pareja de recién casados. Cuando se van a la cama, ella le dice al novio:
─¿Sabes, mi amor? ¡no te lo había dicho, pero yo no sé hacer nada de nada!
El novio le responde:
─No te preocupes, linda: tú te desnudas, te relajas sobre la cama y... yo haré el resto.
Ella le dice:
─No, mi cielo, eso lo hago perfectamente…, lo que no sé hacer es lavar, plancha cocinar…

Al pie de la letra

El esposo regresa de misa, entra a la casa corriendo y se dirige a la esposa.
Con una gran sonrisa la abraza, la levanta tiernamente en sus brazos y danza con ella en el aire alrededor de todos los muebles de la casa.
─Pero, ¿qué es lo que dijo el padre en el sermón?, le pregunta ella. ¿Acaso dijo que los esposos tenían que ser más cariñosos con sus esposas?
─¡Nooooo! -contesta el marido. El padre dijo que teníamos que cargar nuestras penas con alegría y júbilo.

¡Abuelo!

Un chico jugaba con su abuelo en el jardín, y en un movimiento brusco el pelao cae al suelo y se quiebra un dedo de la mano. 
El abuelo lo lleva a la clínica, y allí el médico lo examina:
 
─Su nieto tiene quebrado el dedo –le dijo el médico-, mire como parece una gelatina. Le voy a mandar esta pomada y se la untas todas las noches.
 
A los dos días, el abuelo regresa a casa de su nieto y pudo ver como el dedo del chico estaba tan derechito y duro, gracias a la pomada.
 
El abuelo –maliciosamente– le dice al chico:
 
─Saaa-bes quéee…, Jaaai-mito, teee doooy ciiin-cuenta miiil peee-sos pooor la miii-tad de eeesa pooo-mada.
 
─¡Listo, agüelito!
 
Al día siguiente el abuelo le entrega docientos mil pesos al chico.
 
─Agüelito, pero si sólo eran cincuenta…
 

─¡Síii, miii-jito, peee-ro el reees-to teee looos maaan-da tuuu aaa-buuue-lita!

¿Mieeeee-do..., yooo?

Va caminando un vampiro por la calle y encuentra un niño, y le dice:
─¿Te doooy mie-dooooooooo...?
Y el niño contesta:
─No, glaaa-cias, ¡ya…, ya…, ya teeen-go!

El lechero

Un marido le dice a su mujer:
─Fíjate si es fanfarrón el lechero, dice que se ha acostado con todas las mujeres de este edificio, menos con una…
Y dice la mujer:
─¡Claro, debe ser la orgullosa esa del tercer piso!

De colección

Entramos con mis hijos a un restaurante. Al traernos la cuenta, el mesero le arma tremendo escándalo a mi esposa:
─Señora, por favor, ¡devuelva el tenedor que se guardó en el bolso!
Mi señora –indignadísima– vocifera:
─¡Atrevido! ¡Respete! Yo soy una distinguida mujer. Además, no tengo necesidad de una cosa de esas. ¡Esto es una infamia! en nuestra casa tenemos cubiertos finísimos, y muy elegantes… ¿Cierto, mijo? –se dirigió a mi hijo menor.
 
Y éste respondió:
─¡Sí, mami! Y... ¡de mejoles lestaulantes!

Elogios

La mujer está desnuda, mirándose en el espejo de la habitación.
No está feliz con lo que ve y dice al marido:
─Me siento horrible; parezco vieja, gorda y fea. Realmente necesito un elogio tuyo…
Y él le responde:
─¡De la vista… estas perfecta!

Celoso

Un hombre llega a su casa y encuentra a su mujer haciendo el amor con su mejor amigo, saca la escopeta y lo mata.
Y la mujer muy disgustada, le dice:
─¡Sigue así... y te vas a quedar sin amigos!

Soldadito

En el ejército el sargento le grita a un soldado novato: 
─¡Soldado! Dígame... ¿qué siente usted cuando ve flamear la bandera de su patria? 
─¡Un viento refrescante, mi sargento!

Chino enfelmito

Un chinito llama a su jefe y le dice:
─Jefe: Hoy yo no tlabajal, yo estal enfelmito, duele cabeza, duele panza, no voy tlabajo…
El jefe le responde:
─Mira Zedong, realmente hoy te necesito en la fábrica, cuando yo me siento muy mal, le pido a mi esposa que tengamos sexo, eso me hace sentir mucho mejor y puedo venir al trabajo con muchos ánimos. Deberías probar, te hará mucho bien…
Dos horas después , Zedong vuelve a llamar a su jefe y le dice:
─Jefe: ¡Chinito no shabel que decíl…, glacias pol consejo, ya sentilme mucho mejol, enseguida il a tlabajal, yo felicito mucho a usted, muy linda shu casa, muy glande shu cualto, muy guena shu esposha!


En coma

Se encuentra el paciente tendido en la cama y en la misma habitación su médico, abogado, esposa e hijos. Todos ellos esperando el suspiro final, cuando de repente el paciente se sienta, mira a su alrededor y dice:
─Asesinos, ladrones, mal agradecidos y sinvergüenzas.
Se vuelve a acostar y el doctor, confundido, dice:
─Yo creo que está mejorando.
─¿Por qué lo dice, doctor?, pregunta la esposa.
─¡Porque nos ha reconocido a todos!.

En el bus

El bus va llenísimo, ¡repleto!, con personas de pie, todas muy apretujadas e incómodas. Un pasajero grita:
—¡Pare, pare, me bajo! ¡Vamos como unas obleas...!
Y el chofer le dice:
—Entonces, ¡bájese, antes que se le salga... el arequipe!

Atraco

Atracaban a un sujeto que se defendía tenazmente, pero fue dominado y le encontraron apenas mil pesitos. Uno de los atracadores le dice: 
─¡Usted si es bruto, hombre, por esta miseria casi se hace matar...! 
─Discúlpeme, pero... ¡yo creí que me iban a robar los cien mil que tengo entre las medias!

¡Que horror!

Un hombre llega con un ataque de nervios a ver al psiquiatra y le dice:
─Doctor, llevo tres semanas soñándo que mi suegra viene a comerme cabalgando sobre un cocodrilo.
─¿De verdad?, contesta el psiquiatra.
─Sí doctor, esos ojos amarillos, esa piel escamosa, esos dientes afilados.
─¡Hombre, que terrible!, dice el psiquiatra.
Y el hombre contesta:
─Eso no es nada..., ¡espere que le describa el cocodrilo!

Fecha

Un nino le pregunta a su mamá: 
─Mamá, mamá, ¿cuál es la fecha de mi nacimiento? 
Y dice la mamá:
 
─El 22 de abril.
 

─!Que coincidencia, el mismo día de mi cumpleaños!

Primerizo

En la sala de maternidad el jubiloso padre tomaba demasiadas fotos a su bebé recién nacido. Le pregunta la enfermera:
─¿Su primer hijo, señor?
─No, ya tengo cinco. ¡Es mi primera cámara!

En un entierro

Después de un velorio, salió un coche fúnebre con el cadáver seguido de toda la familia en luto, cuando de repente salió un niño gritando y llorando persiguiendo desesperadamente el coche:
─¡Papito llévame contigo! ¡Papito no me dejes solo!
Toda la gente en el pueblo quedó consternada ante aquella escena tan dolorosa mientras el niño seguía:
─¡Papito por favor llévame! ¡Quiero irme contigo! ¡No me dejes por favor!
En eso se detiene el coche y se baja el chofer todo molesto, y le dice al niño:
─Esta bien hijo te voy a llevar, pero que sea la última vez que vienes conmigo al trabajo.

Confundido

Un borrachito bien mareado, le pregunta a un policía:
─¡Señor agente…hip…! ¿me puede usted decir dónde queda la acera del frente? ¡hip!
El policía amablemente le responde:
─Si señor, es ahí donde está esa señora parada…
─¡Oh vieja bruta…hip… y ella me dijo que era esta!

Colecta

Un niño les escribe a los Reyes Magos una carta, y les pide 250 dólares para comprarse una bicicleta. En la oficina de correos no saben que hacer con la carta, así que la abren, la leen, y se quedan tan enternecidos que hacen una colecta y apenas alcanzaron a reunir 180 dólares y se los envían.
Al cabo de unos días, reciben otra carta para los reyes magos, la abren y dice: 
"Queridos Reyes Magos, muchas gracias por el dinero. Pero la próxima vez no me manden plata por correo, porque esos carteros desgraciados, infelices y ladrones, se han quedado con 70 dólares”.

Entierro

Un viejo acaba de morir.
El cura en la ceremonia exagera con los elogios:
─Este hombre era un buen marido, un excelente cristiano, un padre ejemplar...
La viuda voltea hacia uno de sus hijos y le dice al oido:
─Hijo: mira en la caja..., si realmente es tu papá.

Sopa

El papá caníbal le dice a su hijo:
─Dime hijito: ¿te gustó la sopita de mamá?
-Si papi, pero… ¡me dió uno pesal!

Tímido

Una señora le dice a su esposo:
─Los nuevos vecinos son tan amorosos, él la besa, la abraza, la acaricia.- ¿Por qué tú no haces lo mismo?
─¡Porque yo casi no conozco a esa señora!

Sal o azúcar

En clase, la maestra hablando de cocina y sabores, pregunta
─Nanito: ¿tu madre que te pone en los huevos, sal o azucar?   

─Ninguna de las dos, señolita..., ¡mi mamá en los huevos me pone talco mexana!


Nena...

─¡Mami, me acosté con mi novio, y ya no soy virgen!. 
─Entonces agarrá un limón verde y chúpalo.
 
─¿Y eso me va a devolver la virginidad?
 

─No, pero te quitará la cara de "mujer" satisfecha y viciosa que tienes.

Humoradas de "Majitus"



Con el psicólogo

─Señora, en esta consulta es importante analizar el inconsciente...
─¡Doctor, va a ser difícil que el desgraciado de mi marido quiera venir!

Perfume

En un bus repleto de gente una dama levanta demasiado los brazos y un chico que iba a su lado le pregunta:
─Perdona, preciosa muñeca..., ¿qué perfume usas?
─Pasión del Sahara.
─Pues, ojo mijita..., ¡porque se te murió un camello!

Sordera

Un cura con Pepito en el confesionario:
─Pepito, ¿quién se esta robando el dinero de la limosna de los domingos?
 
─Padre, no le oigo nada.
─¡No te hagas el sordo, Pepito, sé que me escuchas!
 
─¿Qué padre?, ¿qué dice?
─Pepito, ¿fuiste tú quien lo robo, verdad?
 
─Padre no le oigo.
─Pepito ponte en este lado del confesionario y tú me preguntas, asi te demostraré que sí se oye.
 
─De acuerdo, padre.
 
Se cambian de posicion, y Pepito le pregunta al cura:
 
─Padre, ¿quién se anda "gallinaceando" la hija del panadero cada vez que viene a ensayar en el coro?
 

─¡Ay, juepucha! Tenés razón… ¡no se oye nada!

En la escuela

Le pregunta la profesora a Nanito:
─A ver tú, ¿qué es un caníbal?
─Yo no sé, señolita.
─Bueno, te explíco, ¿si te comes a tus padres que eres?
─¡Pos…, huérfano, maestra, huérfano!

Pa dormir

Una viejita le dice a su marido:
─¡Mijito despierte!
─Ummm, no, dice el viejito.
─¡Salomón despierte!, grita la viejita.
─Ummmmn, no, no.
─¡Que despierte, que despierte, Salomón!
─¡No! ¿Qué pasa vieja? ¿Qué pasa?
 

─¡Levántate y tómate las pastillas de dormir!

Un cafecito

Cierto día un tipo va al doctor y le dice:
─La otra noche llegué a mi casa, encontré a mi esposa con otro hombre, me enfurecí y ella me dijo:
Ven, siéntate, anda tómate un café, vamos a platicar.
La siguiente noche, pasó lo mismo y ella me repitió:
Anda, anda, no seas enojón, tómate un cafecito y charlemos.
El doctor le dice:
─¿Y cuál es su problema?
─Oiga doctor, ¿No me hará daño tanto café?

El espejito

Un Pastuso iba por la calle y encuentra un espejito de cartera
lo levantó, se miró y dijo :
─Vé pues... ¡Yo a ese tipo lo conozco..!
Y se lo guardó en el bolsillos del pantalón.
De regreso a su casa, volvió a mirarse en el espejito y repitió:
─¡Caaarajo! ¿De dónde conozco a ese tipo....?
Al entrar a su casa, guardó el espejito en el bolsillo del pantalón.
Se sentó a la mesa del comedor.
Mientras la Josefa le servía la comida, el Pastuso volvió a mirarse en el espejito.
─¡Ah no joda!, que yo a ese tipo lo conozco...,creo que es el que se corta el pelo en frente mío.
Curiosa, Josefa le pregunta:
 
─Oye José ¿qué tienes en la mano?
─Nada importante, mujer.
 
Y guardó nuevamente el espejito en el bolsillo del pantalón.
 
Terminada la cena el Pastuso se fue a dormir, dejando el pantalón sobre la silla.
Josefa quedó intrigada, y una vez dormido su esposo, se acercó a la silla y retiró el espejito del bolsillo ...
 
se miró en el mismo y dijo:
─¡Lo sabía!.
 
La foto de una mujer...¡Y miren la cara de simberguenza que 
tiene !.

Herencia

Un señor con una enfermedad terminal en el hospital decide reunir sus tres hijos, y repartir su herencia.
Al llegar ellos, les dice:
─Javier, a tí te dejo las casas del norte. Óscar, a ti las de la circunvalar, y a ti José te dejo las fincas de Cerrito. –Y... muere.
La enfermera, asustada, le pregunta a uno de los hijos:
─¿Así tenía de plata su papá?...
Y él responde...
─¡Nooo!, nos estaba repartiendo las rutas de la mazamorra.

Enamorados

--Querido, cuando nos casemos, compartiré contigo todas tus desgracias y problemas…
--Pero... ¡si no tengo!
--He dicho: cuando nos casemos.

De regreso

Dice la mujer:
─¡Pepe, has regresado, hace 20 años te marchaste una noche a comprar cigarrillos! ¡Veinte años!
─Oh perdona mi amor, suerte que me lo recuerdas, ya vuelvo… ¡olvidé los fósforos!

Pal cielo

El cura del pueblo dice a los fieles: 
--Aquellos que quieran ir al cielo acérquense. 
Y todos se acercaron rodeándolo menos el borracho del pueblo. Y el cura le dice:
 
--Hermano, ¿tú no quieres ir al cielo cuando mueras?
 

--Ah, ¿es cuando muera?…, ¡pensé que ya se iban!

La mejor posición

En medio de una película pasa el acomodador del cine controlando que todos estén en sus asientos, de pronto por la fila ocho ve un hombre acostado en cuatro butacas, y le dice: 
- Está usted muy cómodo. ¿Quiere que le traiga unas palomitas de maíz y una gaseosa para acompañar? 
- ¡No!... Pero podría llamar una ambulancia que me he caído desde el tercer piso!

Adelanto

Una pareja de ancianos van al médico y este les dice que a su edad deben dormir en cuartos separados y que solo pueden hacer el amor cada quince días.
Durante un largo tiempo los ancianos cumpliéron con ese requisito, una noche la anciana se dirige muy cautelosamente al cuarto del viejo. Cuando él se da cuenta de la presencia de su esposa, le dice:
─¡Pero, mijita!, acuérdese el compromiso que hicimos con el doctor -de hacer el amor cada quince días-, y recuerde que apenas ayer lo hicimos!
Y la venerable anciana le contesta:
─¡Ya lo sé, mijito..., yo vengo a ver..., si me adelanta una quincenita!

¡Que fiera!

Llega un hombre muy borracho a la comisaría de policía y dice:
─¿Puedo ver al hombre, ¡hip!, que entró en mi casa anoche?
─¿Para qué?- le pregunta un policía
─Para que me explique.., ¡hip! ¿cómo entró sin despertar a mi mujer?

Cuando mi florecita aprendió a caminar

Escrito por la señora ANA OROZCO.
Todos los miembros de la familia, contribuimos en su aprendizaje para caminar, poniendo en ello, yo, como abuelita, un especial empeño; con ese amor tan grande que sentimos por nuestros nietos. Así que, en los días que la cuidaba de bebé, que eran dos a la semana, la motivaba para que ensayáramos los solitos, que en muy escasos instantes, había empezado a hacer y que nos llenaba de un enorme regocijo a todos. Era un gran acontecimiento en el hogar y ella en su dulce inocencia, también lo percibía así. Era una bebecita fuerte y valiente y aceptaba mis motivaciones, con una preciosa sonrisa que se dibujaba en su linda carita. También hubo lágrimas, cuando fallaba en su intento de sostenerse solita y, se deslizaba por entre las manos de su abuelita, golpeándose un poco, lo que es inevitable, en ese trascendental aprendizaje del ser humano de mantenerse erguido y avanzar. Lo que será por el resto de su vida, su manera de movilizarse.
Tuve entonces la alegría, que estando conmigo, empezara a dar sus primeros pasos. ¡Fue una alegría indescriptible! Estábamos solas y de pronto, al responder a mi motivación, con su carita siempre iluminada por su dulce sonrisa, el solito se convirtió en tres pequeños pasos tambaleantes, pero sin embargo había decisión en ellos. ¡Mis ojos no podían creer lo que vieron de repente! ¡En su carita también había sorpresa! y en una hermosa complicidad, repetimos el intento. Exitoso también. Ya estábamos seguras, que nuestro empeño, había surtido sus frutos....¡MI FLORECITA HABÍA APRENDIDO A CAMINAR!
Quería que todo el mundo se enterara. Se apoderó de mí, una pequeña locura de felicidad y, llamaba emocionada a la señora del servicio (que se encontraba en el primer piso de la casa). Acudió solícita y, "mi Florecita", muy orgullosa de su hazaña, volvió a dar sus inocentes pasitos tambaleantes. La llevamos al balcón interior (donde tenía más espacio), la motivamos con sus peluches y, prendida de su vestidito blanco, largo, que le ayudaba a sentirse más segura y guardar el equilibrio, nos dio una dulce sinfonía de pasitos inocentes….
 

La filmamos, llamé a la mamita, al papito y a toda la familia. Hubo mucho júbilo y felicidad esa noche en la casa y quedó grabada en nuestra memoria, ésta su hazaña de APRENDER A CAMINAR, cuando tenía 11 meses y medio. Un 2 de Octubre en la tarde...

Sabiduría

La madre superiora irlandesa de 98 años, estaba en su lecho de muerte. Las monjitas la rodeaban, intentando hacer cómodo su último viaje. Trataron de darle leche calentita, pero no la quiso. Una monjita se llevó a la cocina el vaso de leche, recordó una botella de güisqui que les habían regalado por Navidad, y le puso un trago doble a la leche. Volvió al lecho de la superiora y le acercó el vaso a la boca. La superiora bebió un sorbito, luego otro y antes de que se dieran cuenta, se lo había acabado hasta la última gota.
Las monjitas le dijeron:
─Madre, diganos sus última palabra de sabiduría antes de morir.
Con pocas fuerzas, se incorporó un poco y les dijo:
─¡No vendan esa vaca, muchachas…, no la vendan!

Malicioso


En la alcoba, el anciano susurra al oído de su esposa:
─Mijita, mi amorcito, ¡estoy sin calzoncillos!…
─¡Ay, duérmete tranquilo!... ¡mañana te lavo unos!

¿Lambió o lamió?

─¿Pepito, por qué golpeas a ese niño?
─Profe, es que lambió mi comida....
─No Pepito....Lamió....
─¿Cómo, también la mió... ahora sí, mato ese desgraciado!

Pescado

Una pareja fue a cenar a un restaurante de comida de mar. La esposa se levanta al baño y mientras tanto el mesero se acerca y pregunta:
─¿Vino con su bagre, señor?
─¡Pués si..., no ve que está de cumpleaños!

En las últimas

En el consultorio, al final de la tarde, el médico da la pésima noticia: 
─Usted, señora, tiene seis horas de vida… 
Desesperada, la mujer corre para su casa y le cuenta a su marido.
 
Los dos deciden gastar el tiempo que le queda de vida de ella, haciendo el amor.
 
Lo hacen una vez, pero ella pide repetirlo.
 
Lo hacen de nuevo, y ella pide más.
 
Después de las tres veces, ella quiere de nuevo, y el marido le dice:
 

─¡Ah, no…, ya basta! Yo me tengo que levantar temprano mañana… ¡y vos no!

Entre novios

Unos novios pastusos, hablan sobre la ropa que usarán el día de su boda.
─¡Pues yo iré de vestido blanco, pero… sin velo, no me caso!
Y él –bajándose el pantalón– le dice:
─¡Pues, velo, velo…!

Entrenamiento

Un pastuso le dice a un paisa:
─Oye paisa, ¿por qué no le enseñás a mi mujer a hacer el amor?
─¡Cómo así, pastuso! ¿y eso por qué?
─Si. Es que la suya lo hace tan bueno.

Sediento

─¡Por favor, señora, vengo a pie desde el pueblo vecino, piedad con este pobre sediento…!
─¡Claro que sí, buen hombre…, un vaso de agua no se le niega a nadie!
─¿Agua? ¡Señora, le dije sediento, no mugriento!

¡Huy, abuelo!

El viejo de 87 años se casó con una niña de 19.
─¡Pero, abuelito –le dice uno de sus nietos– piensa un poco en tu salud: una relación así puede ser fatal!
─Si tiene que morir de placer, morirá. ¡Ya veré con quién la reemplazo!

Lo que me pasa

Salí de Medellín a Bogotá y en el aeropuerto entré a un lujoso restaurante, el mesero me dice:
─¿Le traigo la carta al señor?
─¡Cómo así…! ¿acabo de llegar… y ya me escribieron?

¿Sigues tú?

Mala costumbre familiar en el principio de acción y reacción aplicable a lo de: ¿cuándo te vas a casar?
En mi época de “mozuelo”, mis tías solían acercarse a mí en las bodas, dándome golpecitos en las costillas, me decían:
─¿Serás tú el siguiente…?
Dejaron de hacerlo, cuando yo empecé a hacer lo mismo con ellas… en cada funeral.

Pepito en clase

La maestra dice:
─Voy a escoger tres niños que me digan una oración que tenga que ver con “estatua”, María, díme una oración con “estatua”.
─Bueno maestra, yo fui a San Juan y ví la estatua de Cristobal Colón.
─¡Muy bien! Ahora tu Juanita…
─Señolita, yo fui a Estados Unidos y vi la estatua de la libertad.
─¡Perfecto!… ¿y tú, Pepito?
─Mire preciosa maestra, yo fui a casa de mi agüelita, ella tropezó conmigo, se cayó y “estatua”, ¡está tua... jodida! 

Venta de biblias

Un cura le da 10 biblias a cada persona para ver cuántas podían vender, tres personas se van a vender las biblias y cuando regresan les dice el Padre:
─A ver tú, ¿Cuántas biblias vendiste?
─Yo vendi sólo 5 biblias.
─Muy bien.
─Y tú, ¿Cuántas vendiste?
─Yo vendí 7.
─Pues muy bien, ¿Y tú?
─Yo… yo las las ven… vendí to... to… todas.
─¡Que bien! ¿Y cómo lo hiciste?
─¡Es que… que les di…di….dije que… que me las com… com… pra…praban o se las le… le… leía!

¡Al tren...!

Tres borrachos que llegan a la estación.
¡Din, don din! El tren con destino a Sevilla, sale ahora mismo por la vía 4 din, don, din!
Se ponen a correr pero el Jefe de estación ayuda a uno a subir, ayuda al otro, y cuando llega al tercero el tren ha cogido ya velocidad, y no puede subirlo.
 
─Lo siento, pero ya es tarde.
 

─Pues más lo van a sentir mis dos amigos, sólo habían venido a despedirme.

Mensaje militar


El sargento envía un mensaje a su tropa:
¡Capturar al general Fuentes, con el mayor sigilo!
Un día después le contestan:
General Fuentes capturado, seguimos buscando al mayor Sigilo.

Por "loca"

Un general le dice al soldado:
─¡Soldado, ice la bandera!
El soldado responde:
 

─Lo felicito, mi general, ¡le quedó… di-vi-na!

Superimportante

Juan Pablo II, en su último viaje, llegó a Mérida. Lo fueron a recibir en un BMW increíblemente precioso, lo ve Su Santidad, y le dice al chofer: 
─¡Qué bárbaro¡... ¡qué carrazo! Déjame yo manejo... 
─Pero... ¡Su Santidad...!
─Dame las llaves, hombre, y tú... vete allá atrás.
Su santidad cogió la cabrilla, se fue a 250 millas, se subió al andén, se pasó tres semáforos en rojo, chocó con una patrulla que lo detuvo de inmediato. El agente de tránsito llama a su comandante y le dice:
 
─¡Jefe, no me lo va a creer, una limosina último modelo ha chocado una gran cantidad de carros, creo que nos sacamos el billete para nuestro sueldo este mes, debe ser un hijo de papi…, ¡mándeme refuerzos!
 
Llegan varias patrullas, rodean la limosina, un agente se baja y toca la ventanilla de vidrios polarizados. Al bajar el vidrio, el policía ve quién conduce…
 
─¡Juan Pablo II…! Déjeme consultar con mi comandante…
 
Le habla por radio a su jefe, y le dice:
 
─¡Señor…, no me lo va a creer…, creo que nos sacamos la lotería, jefe… este tipo es superimportante...
 
─¿A quién traes tú?… ¿un gobernador?
 
─¡No jefe, más importante!
 
─¡Al Presidente!
 
─¡Más importante!
 
─¿A quién será, pues, ¿a quién traes?
 

─¡Mire jefe…, ni más ni menos, viene manejando Juan Pablo II, y estoy seguro de que el de atrás es… ¡Jesucristo!

El tarta... tarta... tartamudo

Unos cubanos deciden abandonar la isla, van a la playa y le dicen a un balsero:
-¡Chico, nosotros queremos ir a Miami, pero cuando tú veas que viene la guardia costera nos avisas para nosotros saltar del bote...
Y dice el balsero:
-Mu... mu...muy bi... bi... bien. Cu... cu... cuando ve... ve... venga la gu... gu... guardia, yo me pa... pa... paro y les gri... gri... grito: ¡Tí... tí..., ti... ti... tírense!
Ya estando en altamar, el balsero se para y les grita:
-¡Tí... ti...!
 

Todos los cubanos se tiran y el balsero termina:
-¡Ti... ti... tiburones!

Noticias

Un hombre salió de la Bogotá para pasar unas vacaciones en la ciudad de Cartagena. Al llegar al hotel, el esposo decide mandar un e-mail a su mujer. Como no encontró el papelito en donde había anotado la dirección de ella, trató de recordarlo de memoria.
Por mala suerte se equivocó en una letra, y el mensaje fue a parar a la dirección de la esposa de un pastor fallecido el día anterior. 
Cuando la señora fue a revisar sus e-mails, dio una ojeada al monitor, gritó de horror y cayó muerta en el piso. Al oír el grito, su familia corrió hacia el cuarto y leyó lo siguiente en la pantalla: "Querida esposa, acabo de llegar. Fue un largo viaje. Aquí todo es muy bonito. Muchos arboles y jardines. A pesar de tener aquí pocas horas, me gusta mucho. Ahora voy a descansar. Hablé con el personal de aquí y... está todo preparado para tu llegada mañana. Estoy seguro de que te va a encantar. Besos de tu amoroso esposo. P. D.: Aquí hace un calor infernal...!".

Fiesta de bodas

En la fiesta de bodas, la novia le dice al novio: 
─¡Papito, mi amor..., quiero estar ya mismo contigo! 
─¡Pero cómo se te ocurre, aquí en pleno baile...! En fin, tengo una idea: como yo soy médico, tú te haces las desmayada y asi nos podemos encerrar diciéndo que voy a examinarte…
 
La novia finge desmayarse, todos corren, todos gritan. El novio los calma y les dice:
 
─¡Tranquilos..., yo soy médico y la voy a examinar!
 
La levantó, la metió a una pieza y cerró la puerta. Todos los invitados esperaban su salida. A los veinte minutos salió el médico y una viejita le dice:
 
─Doctor: ¿qué tenía la novia?
 
─Un leve desmayo nada más..., ahí le apliqué una inyeccioncita.
 
Y la viejita, bajando la mirada y muy asustada, le señala con el dedo:
 

─¡Ay, doctor, pero... ¡se le quedó la jeringa afuera.

Pa planchar

Un niño le pregunta a su madre:
- Mamá, Mamá, ¿por qué metes el pijama bajo la almohada?
- Para que no se arrugue.
- ¿Y por qué no metes a la agüelita?

Viagra

Llega un viejito a la farmacia:
─Por favor me vende veinte pastillas de viagra...
─¿Trajo la fórmula?
─¡No...! Pero traje el "enfermito".

Ingenuo


Un hombre llega a su casa, va a su cuarto y allí encuentra a su mujer desnuda y muy exaltada. 
El hombre un poco "ingenuo" le dice:
─Amor: ¿estas bien? ¿tienes un ataque? amor, ¿que te pasa?, amor...
En ese momento entran sus pequeños hijos y le dicen:
─Papá en el sótano hay un cuco, sí un cuco...
El señor se va hasta el sótano y allí encuantra a su mejor amigo y le dice:
─¡Ay Juanchito... mi mujer con un ataque y tú aquí desnudo asustándome los niños!

Oración para la cena

Ante muchos invitados, la madre de la familia le pide a su hija de seis años:
─¿Te gustaría bendecir la mesa?
La niña le responde:
─¿No sé qué decir?
─Pues dí lo que has oido decir a tu mamá -le pide la madre-
Entonces la niña, sintiéndose más segura, junta sus manos e inclinando la cabeza dice:
─¡Dios mio: ¿cómo se me ocurrió invitar toda esta chusma a mi cena?

Apetito

Se cuenta de doña María Dolores en Yarumal, que una vez llegaron a su casa unas amigas a hacerle visita y entre charla y charla le preguntaron:
─Ve, Lola: ¿A vos no te da pensión dejar a Manuel que charle con esas muchachas en el parque? ¿No te da pensión que de pronto se le abra el apetito po'alla?
─¡Queliase que se le abra el apetito en la calle, con tal de que venga a comer a la casa!

Camas separadas

Un par de viejitos tenían 50 años de casados, fueron al médico y éste les dice:
─Si ustedes quieren vivir más años, no pueden volver a hacer el amor, estan muy delicados de salud, yo les recomiendo que separen sus alcobas y cada uno duerma por separado, ¡es lo mejor!
El viejito muy temeroso, llego a casa y cambió su cuarto para el segundo piso dejando a la vieja en el primero.
Ya acostado y como a las 2 de la madrugada, sintió que tocaban la puerta con mucho desespero.
─¿Qui...quien es?
─¡Una viejita..., que se quiere morir!

Taxista

Un pasajero le toca el hombro al taxista para hacerle una pregunta. 
El taxista grita, pierde el control del coche, casi choca con un camión, se sube a la acera y se mete en una vitrina haciendo pedazos los vidrios. 
Por un momento no se oye nada en el taxi, hasta que el taxista dice:
 
─Mire amigo, jamás haga eso otra vez, ¡Casi me mata del susto!
 
El pasajero le pide disculpas y le dice:
 
─No pensé que se fuera a asustar tanto solo le toqué el hombro.
 
El taxista le dice:
 
─Lo que pasa es que es mi primer día de trabajo como taxista.
─¿Y qué hacía antes?
 

─Fuí chofer de carroza funeraria durante 25 años.

Juego de golf

Dos mujeres jugaban golf en una mañana soleada. De pronto vieron como la pelota se dirigía directamente hacia unos hombres que jugaban en el siguiente hoyo. La pelota golpeó a uno de los hombres, quien de inmediato juntó ambas manos en su entrepierna y cayó al suelo rodando y gimiendo lastimosamente.
Las mujeres corrieron hasta donde estaba el hombre. Una de ellas, sintiéndose culpable, dijo:
─Por favor, déjeme ayudarlo. Soy quiropráctica y -si usted me lo permite- sé como quitarle ese dolor.
─¡Ouch..., auuuu, nooo, nooooo! Estaré bien...el dolor se me pasaré en unos minutos, -contestó el hombre, mientras permanecía en posición fetal, tirado en el césped y con las manos juntas en su entrepierna.
La dama insistió, hasta que él finalmente permitió ayudarlo. Ella, muy gentíl y acuciosa lo acostó a su lado, le separó las manos, puso sus manos en la entrepierna y... comenzó a masajearlo:
─¿Se siente bien, ya?, -preguntó la chica.
─¡Me siento... fantástico, -contestó el hombre. Pero...¡el dedo me sigue doliendo!

Mi anécdota en Boston

En nuestro último viaje a la ciudad de Boston, nos reunimos un grupo de amigos y entre trago y chistes, yo como siempre, fuí muy amable con algunas preciosas chicas que allí llegaban.
Mi señora, poco a poco se fue disgustando y como a las 2 de la madrugada se fue a dormir.
Yo continué disfrutando de la reunión y a las 3 me fui a acostar a la pieza que nos habian asignado.
Al llegar a la alcoba, pude observar a mi mujer acostada en el borde de la cama y dando la espalda. Yo no le dí importancia y me acoste al otro borde de la cama, dándole tambien la espalda.
Pero a eso de las 4 de la madrugada, yo sentí que ella me mandaba la mano "allá donde sabemos", y muy alterado le dije:
-¡Cómo asi! ¿no dizque está muy disgustada conmigo?
A lo que me contesto:
-Yo si estoy muy disgustada con usted, pero...¡con ésta prechochura no!

Invitación

Una mujer muy melosa y sensual, me invitó a su apartamento, ya sentado en la sala, me dijo:
-Espérame aqui, papito, voy al baño a asearme un poco, me maquillo, me pongo mi baby doll, luego paso a la cocina y te preparo una bebida afrodisiaca, me meto en la cama y...
Lo único que pude decir, fue:
-¡No mijita...yo mejor vengo otro día! ¡cuando estés mas desocupadita!

En la iglesia

Pepito, se puso a vender huevos dentro de una iglesia:
-¡Huevos! ¡huevos! ¡huevos frescos..!
El sacerdote, muy molesto, grita:
-¡Sáquen ese niño de los huevos...!
Y Pepito, muy asustado, dice:
-¡Padre, mejor de la orejita!

Entre viejitos

─Ananias, y…¿cómo te ha ido con el problema de la memoria?
─¡Muy bien, José! Fuí donde un médico que me recetó unas pastillas muy buenas, ¡si señor!
─¡Vé hombre, que bien! Y…¿cómo se llaman?
─Pues…, pues…díme primero: ¿cómo se llama esa brisa que le da a la hierba cuando amanece?
─!Pues, rocío!
─¡Oh si! Rocio…mija ¿cómo se llaman las pastillas pa’ la memoria?

De aniversario

La mujer le dice a su marido:
─Mi amor, hoy es nuestro aniversario de bodas..., ¿por qué no matamos un pollo?
Y él le contesta:
─¿Qué culpa tiene el pobre pollito, por qué no matamos a tu hermano...,
que fué quien nos presentó?

¡Sorda!

La suegra –que ya estaba muy sorda– llegó a la casa del yerno, quien sabía muy bien de su pérdida auditiva. La recibió diligentemente: le abrió la puerta y, con una enorme sonrisa, la saludó diciéndole:
—Adelante, ¡vieja estúpida! ¿De dónde viene la madremonte ésta con esa cara de bruja?
A lo que la suegra responde:
—De comprar unos audífonos, ¡desgraciado...!

Jabón pa la piel

Una muchacha entra a la droguería y dice: 
─¡Aloye, seño! véndame un jabón bien bueno pa la piel! 
─Mire éste Maria Jesús, es muy suave, le lava la piel y la conserva...
Y le dice la muchacha:
─¡No, seño, yo necesito uno no más pa la piel; porque “la conserva” me la lavo con jabón de tierra!

¡Qué ayudita!

Un hombre le pide ayuda a su vecino para mover un sofá que se había atorado en la puerta. Uno se fue a un extremo y el otro también. Forcejearon un buen rato hasta que quedaron exhaustos, pero el sofá no se movió.
─Olvídelo, jamás podremos meter esto- dijo el hombre. 
El vecino lo mira con extrañeza y le pregunta:
─¡Ah...! ¿Era pa meterlo?

Perdidos

En la madrugada, tres borrachitos estan en la puerta de una casa, uno de ellos dice:
─¡Heeeey, ¿Hay alguién en casa?
Y una señora desde la ventana del segundo piso le contesta:
─¡Borrachos!, déjense de molestar.
─¿Es aquí la casa de "Majitus"?, dice uno de los borrachos.
─Sí, contesta la mujer.
Y el borracho contesta :
─Puede bajar a decirnos, ¿Cuál de nosotros es "Majitus"?

Por robo

En un juicio por el robo de un coche, el juez le dice al acusado:
─Por falta de pruebas, es declarado inocente y se retiran los cargos.
─Perdone señoría, ¿Significa eso que me puedo quedar con el coche?

En clase

La profesora trata de aplicar sus cursos de Psicología.
Comienza su clase diciendo:
─Todo aquel que crea que es estúpido, que se ponga de pie.
Luego de unos segundos de silencio, Nanito, se levanta.
La docente le pregunta:
─Nanito... ¿Crees ser estúpido?
─No, señolita..., pero me dá pena verla parada solita...

Disfraz


En dos cuotas


El marido llega a su casa y quiere entrar al baño, pero su esposa se esta bañando él le pide que por favor salga que es urgente, ella se coloca una toalla y sale. Justo tocan el timbre, ella abre y es el vecino que le dice:
-Que bella estas Marta, si me muestras tus pechos te regalo 200 pesos.
La mujer lo piensa y acepta, se baja la toalla y le muestra los pechos. El vecino le dice entonces:
-Son hermosos, si te bajas toda la toalla te regalo otros 200 pesos.
La mujer sin pensarlo mucho se baja la toalla y se muestra toda. El vecino agradecido le entrega los 400 pesos y se va. Al regresar al baño el marido le pregunta:
- ¿Quien era?
- Era el vecino del frente...
- ¡Que bien! ¿me trajo los 400 pesos que le presté ayer?

Indio en casa de citas

Llega un joven indio a una casa de citas y le dice a la encargada: 
─¡Indio quelel mujel!, ¡indio quelel mujer!
 
─¿Tienes experiencia, joven indio?
 
─¡Pos… no!
 
─Entonces en ese caso, vete a la selva donde vives, búscate un árbol con un huequito, practica allá por un mes y regresas…¿de acuerdo?
 
El indio se va, practica como la mujer le dijo y al mes regresa con una tabla debajo del brazo. Al llegar le dice a la mujer:
 
─¡Indio quelel mujel…, ¡indio tenel expeliencia!
 
La mujer lo hace entrar y llama a una hermosa mujer para que lo atienda.
 
La mujer y el indio suben al cuarto, ella se desviste y el indio coge la tabla y le da tremendos tablazos en las caderas.
 
La chica, muy enojada, le dice:
 
─¿Qué te pasa, indio bruto, por qué me pegas con esa tabla?
 
Y el indio le dice:
 

─Indio quelel asegulalse que tú... ¡no tenel avispas en güequito!

Pensamientos de Mafalda


Plata en los cabellos.
Oro en los dientes.
Piedras en los riñones.
 
Azúcar en la sangre.
Plomo en los pies.
Hierro en las articulaciones.
Y una fuente inagotable de "gas natural".

¡Nunca se pensó que a partir de los 40
 
se pudiera llegar a tener tanta riqueza!

Muy listo

Una hermosa rubia está sentada sobre la camilla del cirujano, desnuda e impaciente. A los pocos minutos entra un hombre vestido de blanco y ella le dice:
─¿Está listo para revisarme?
─¡Sí!
El hombre la revisa detalladamente, la toca por todos los lados, la hace agachar, doblar, voltear...
La joven le dice:
─¿Usted cree que va a necesitar operarme?
─Bueno, en realidad eso pregúnteselo al doctor..., yo solo vine a pintar la puerta del baño.

¿Aburrido?

Llega un turista a un solitario pueblo, va donde el cura y le dice:
─Oiga padre: ¿cómo hace usted para vivir en un pueblo tan aburridor?
─Yo lo paso bien, hijo mio, mientras tenga a mano mi vino y mi rosario...
─¿De verdad padre?
─¡Claro! Rosario: pásame el vino.

¡Fírme!

En el ejército:
─¡Firme! mi soldado.
─Pero sargento: yo no sé firmar, pues...
─¡Pedazo de bruto! ¡firme! con los pies.
─Ay mi sargento, si no sé firmar..., ¿cómo lo voy a hacer con los pies..., que es más difícil?

De Puerto Tejada

Un negrito de Puerto Tejada se presenta ante la consejería de una universidad:
─Buenos días, vengo a estudiar..., ¡vé!
─Claro señor..., ¿qué asignatura?
─¡Filosofía!
─¿En que rama?
─¿Cómo asi que en qué rama? ¡En un pupitre, como todos los blancos...,vé!

Granadas

A dos policías pastusos se les ordenó recoger dos granadas que un asaltante dejó en un banco, al llegar las desactivan y las llevan en su patrulla, uno de ellos pregunta:
─Oye Martinez: ¿Y si explota una?
─¡Decímos que solo encontramos una..., pues!