Homenaje a un ídolo, Elio Roca (1943-2021).

Los maravillosos 60...


 Topo Gigio es una marioneta de televisión infantil que interpreta a un ratoncito italiano. Fue creado por Maria Perego en 1958, su primera aparición televisiva fue en 1959 en el programa italiano Canzonissima y su voz original fue interpretada por el actor Peppino Mazzullo; ya en América su voz fue la de Gabriel Garzón.
Este diminuto personaje nos trajo la más tierna sensación de amor con sus magestuosas interpretaciones.

Me escapé

Venía manejando a 90 kilómetros, y de pronto detrás de mí apareció un carro de la policía, al verlo aumente a 120 y el policía detrás, al cabo de un rato me pudo alcanzar, se bajó furioso y me dijo:
-Mire joven, llevo 14 horas de trabajo continuo, mi familia me espera y usted me obliga a seguirlo a esta velocidad... tiene que darme una muy buena razón por la cual usted quería escapar, de lo contrario lo llevo preso.
Y le dije:
-Perdone usted oficial, lo que pasa es que mi mujer se me fugó hace 15 días con un policía y cuando lo vi a usted detrás de mí, pensé que era el mismo policía que me perseguía pa devolvérmela... ¡Y me dejó ir!

Pensión

Al cumplir la edad reglamentaria, me presenté al Seguro Social para tramitar la pensión por vejez.
La secretaria, detrás de la ventanilla, me pidió el pasaporte para verificar mi edad y mi identidad; busqué en todos los bolsillos; pero, finalmente caí en la cuenta de que lo había dejado en casa. Le dije a la señorita que lo sentía mucho, que no tenía ahí el documento, que más tarde regresaría.
La oficinista, entonces, me dijo:
¡Solo..., desabotónese la camisa!
Le mostré los abundantes pero canosos vellos del pecho, y me dijo:
Esos vellos canosos son prueba suficiente para mí.
Procesó mi solicitud, y... ¡me dio la pensión!
Cuando regresé a casa –muy emocionado– le conté a mi esposa lo sucedido. De inmediato ella comentó:
¡Ay, mijo...!, debiste bajarte los pantalones; ¡a lo mejor te hubieran dado, también, una... pensión por invalidez!

Oiga bien...

El viejito en la cama, le dice a su esposa:
—Mija, baje al primer piso y me trae un helado, pero apunte para que no lo olvide...
—¡Yo lo recordaré, viejo!
—Y le pones fresas, pero apunte para que no lo olvides...
—¡Que no lo olvidaré!
—Ah... y le pones unas galleticas wafer, pero apunte para que no lo olvides...
—¡Viejo, te he dicho y una y otra vez, que no lo voy a olvidar!
Al rato sube la viejita con chocolate y pan y le dice el viejo:
—Te das cuenta vieja, por no apuntar... ¡se te olvidó el arroz con pollo que te pedí!

Limones

Dos pequeños se roban un saco de limones del vecindario, y optan por dividirlos en un lugar callado y apartado.
Uno sugiere: “¡Vamos al cementerio que a esta hora no hay nadie!”.
Al saltar la cerca del cementerio, dos limones se salen del saco; pero... no le dan mayor importancia.
Algunos minutos más tarde, un borracho pasó cerca de la puerta del cementerio y escuchó una voz que decía: “¡Uno para tí, uno para mí... uno para tí, uno para mí...!”.
Inmediatamente se le fue la borrachera, y corrió tan rápido que cayó en el atrio de la iglesia, donde estaba el párroco a quien le dijo: “¡Padre, padre, venga conmigo, he sido testigo de que Dios y el diablo se están repartiendo los muertos del cementerio!”.
Ambos corrieron de regreso al cementerio, y al llegar a la puerta aún la voz decía: “¡Uno para ti, uno para mí... uno para ti, uno para mí...!”.
Repentinamente, la voz se detiene y dice: “¿Qué hacemos con los dos que están afuera?...
Padre y borracho salieron corriendo despavoridos, gritando: “¡No, no. Aún no estamos muertos..., no nos cuenten!”.

De "niñerías"

En la escuela:
-Maestra, ¿de dónde salen los pollitos?
-De los huevos, Jaimito.
-¡Ay maestra... no me asuste!

***
El niño le dice a su papá:
-Papi, ¿puedes hacerme la tarea de matemáticas?
-¡No hijo, eso no esta bien!
-No importa, inténtalo de todas maneras.

****
Jaimito le dice a su amiguita:
-Quisiera tener bastante plata, pa comprarme un elefante...
-¿Y tú, para qué quieres un elefante?
-¡Yo no quiero el elefante... yo quiero es la plata!

****
En clase:
-Jaimito, contéstame esta pregunta: Si tienes 500 pesos en un bolsillo del pantalón y 200 pesos en el otro... ¿qué tienes?
-Pues, debo tener los pantalones de otro, porque yo estoy limpio profe.

****
Entre hermanitos:
-Oye, ¿como cuándo crees que vas a terminar de armar ese rompecabezas?
-Pos no se, en la caja dice de 5 a 8 años.

****
En la escuela:
-Jaimito: ¿con qué mato David a Goliat?
-Con una moto, señorita.
-Niño... ¿No sería con una onda?
-Ah... ¿es que tenía que decir la marca también?

****
-Jaimito: ¿por qué le pegaste a tu hermanita con la silla?
-¡Ah... porque el sofá esta muy pesado!

****
La mamá embarazada le dice a su hijo:
-Jaimito, ¿que quieres que te traiga el niño Dios, un hermanito o una hermanita?
-¡Ay mamá, yo creo que te va a doler mucho, pero yo quiero una bicicleta!

****
Jaimito le dice a la mamá:
-Mami, a la salida del colegio, unos niños me cogieron a patadas y a puños...
-Oye... ¿y no te vengaste?
-¡Claro mami... si no me vengo, me matan!

****
Una niña le dice a su mamá:
-Mami, ¿cuándo voy a tener mis senos tan grandes como los tuyos?
-¡Ay hija, te faltan muchos años!
-!No jodas mami, y yo que los necesitaba pal sábado!

Cuando yo me vaya

Cuando yo me duerma, respeta mi sueño, por algo me duermo; por algo me he ido.
Si sientes mi ausencia, no pronuncies nada, y casi en el aire, con paso muy fino, búscame en mi casa, búscame en mis libros, búscame en mis cartas, y entre los papeles que he escrito apurado.
Ponte mis camisas, mi sweater, mi saco y puedes usar todos mis zapatos. Te presto mi cuarto, mi almohada, mi cama, y cuando haga frío, ponte mis bufandas.
Te puedes comer todo el chocolate y beberte el vino que dejé guardado. Escucha ese tema que a mí me gustaba, usa mi perfume y riega mis plantas.
Si tapan mi cuerpo, no me tengas lástima, corre hacia el espacio, libera tu alma, palpa la poesía, la música, el canto y deja que el viento juegue con tu cara. Besa bien la tierra, toma toda el agua y aprende el idioma vivo de los pájaros.
Si me extrañas mucho, disimula el acto, búscame en los niños, el café, la radio y en el sitio ése donde me ocultaba.
No pronuncies nunca la palabra muerte. A veces es más triste vivir olvidado que morir mil veces y ser recordado.
Cuando yo me duerma, no me lleves flores a una tumba amarga, grita con la fuerza de toda tu entraña que el mundo está vivo y sigue su marcha.
La llama encendida no se va a apagar por el simple hecho de que no esté más.
Los hombres que “viven” no se mueren nunca, se duermen de a ratos, de a ratos pequeños, y el sueño infinito es sólo una excusa.
Cuando yo me vaya, extiende tu mano, y estarás conmigo sellada en contacto, y aunque no me veas, y aunque no me palpes, sabrás que por siempre estaré a tu lado.

Entonces, un día, sonriente y vibrante, sabrás que volví para no marcharme.

Autor: CARLOS ALBERTO BOAGLIO

Romance

Los novios hablando por teléfono:
-Mi amor..., yo por ti soy capaz de atravezar el atlántico nadando.
-¿Verdad..., tanto me quieres?
-Claro mi amor, por ti soy capaz de cruzar el Sahara caminando sin zapatos.
-¿De verdad?, tan lindo..., mi amorcito..., ¿por qué no vienes? 
-No ahora no...,  ¡porque esta cayendo un aguacero!


Calladita

De madre a hija
-Hija, tu marido llegó borracho a las cuatro de la mañana, se metió en mi cuarto e hiso el amor conmigo tres veces...
-¡Pero mamá...! ¿y usted no le dijo nada?
-¡Ay mija... usted sabe que a ese desgraciado no le hablo!

Que pena

Un hombre le dice a su amigo:
-Vea hermano, desde aquí en mi apartamento, puede ver como su mujer se la juega, mire por estos binoculáres para que se entere...
El hombre mira y empieza a exclamar:
-¡Uy que brazos los de ese man...!
¡Uy que piernas las de ese man...!
¡Uy que cuerpo el de ese man...!
¡Uy que "cosa" tiene ese man...!
Cuando ve que su mujer se desnuda, dice:
-¡Uy... que pena con ese man!

Donación

En una casa otoñal, estaban pidiendo donaciones, y un viejito todo desbaratao grita:
-Yo... yo... yo dono mi, mi pajarito.
La gente empezó a aplaudirlo y le decían:
-¡Que se pare... Que se pare!
Y dice el viejito:
-Noooo... pues, si se para, no lo dono.

Pillado...

El papá va al cuarto de su hijo para aconsejarlo, pues le ha notado algúnos movimientos "raros".
-Hijo, Necesito que usted saque ese hombre que lleva dentro.
Y el hijo exclama:
-¡Milton, mi amor, salga que mi papá ya lo vió!

El humor pastuso

La fama de los pastusos obedece a su buen sentido del humor. Su particular forma de hablar es muy graciosa; y, aunque nos mofamos de ellos, los admiramos por su bagaje intelectual.
Ellos se inventan los chistes en los que resultan perdedores y en los que se vengan del resto de parroquianos del país.
Nos burlamos de ellos por lo torpes. Del mismo modo de los antioqueños (paisas), por exagerados; de los costeños, por perezosos; de los bogotanos (rolos), por creídos; o de los santandereanos, por cascarrabias. Pero son solo estigmas que se han creado, reflejando la diversidad cultural.
Y yendo más allá, de los argentinos decimos que se creen superiores al resto del mundo; de los españoles (gallegos), que son mal hablados; y de los mejicanos, que son machistas y bravucones.
Mejor dicho: Los pastusos crean sus propios chistes, ¡pero se enverracan... cuando se los explican!

Clases

Un pastudo le dice a un paisa:
-Oye, paisa: ¿por qué no le enseñas, pues, a mi mujer a hacer el amor, pues?
-¡Cómo así, pastuso!, ¿que le enseñe a su mujer a hacer el amor?…, y eso, por qué?
-Si, paisita…, ¡es que su mujercita lo hace tan bueno, pues!

Viaje

Un pastuso llama a una agencia de viajes:
-Señorita: ¿tienen pasajes, pues, para Leticia?
-No señor, ya no tenemos.
El pastuso cuelga, y le dice a su mujer:
-¡Hora, verás, Leticia!..., ¡nos quedamos, pues, sin pasaje pa vos! 

Duda anatómica

El médico al paciente pastuso:
-Le voy a hacer una operación ocular…
-Doctor, y después... ¿sí me podré sentar, pues?

Cambio de ruta

Un pastuso sale del hospital ya recuperado, y al tomar el bus le pregunta al chofer:
-¿Para dónde va este bus, pues?
-Para el cementerio.
Hora verá, pues!… Y pensar que ya había dicho en casa… ¡que estaba mejorcito, pues!

El celular

Un pastuso compra un celular, pero nadie lo llamaba. Semanas después se va a un motel con su amiguita y ahí suena el teléfono. Desesperado contesta:
Halóoo!…, ¿quién habla, pues?
-Soy yo, Chela, tu mujercita, pues...
Y, muy sorprendido, le contesta:
-¡Mi amor! ¿Cómo supiste, pues, que estaba en este motel, ahhh?

Se buscan

Un pastuso va a renovar su licencia, y ve una foto de terroristas en un cartel.
-¿Y esos quiénes son, pues?
-Terroristas, gente muy peligrosa.
-¿Y para qué ponen la foto, pues?
-Para atraparlos: si alguien los ve, viene y los denuncia…
-¿Y por qué no los atraparon, pues…, cuando les tomaron la foto, pues?

El amor...

Una mujer le dice a su novio
-Amor hoy me operan del corazón.
-Lo sé cariño, que todo salga bien.
-¡Te amo.
-Yo te amo mucho más.
Después de la operación, la chica despierta y ve a su papá frente a la cama...
-Papá, ¿dónde está mi novio?
-Pues... hija, ¿no sabes quién te donó el corazón?
-¿Que quéeeeeee? ¡No puede ser... nooooo!
-Mentiras, ¡está en el baño; ahora viene!

Confundido

Pregunta la profesora:
-A ver, Nanito, ¿cuántos huesos tiene el hombre?
-¡Fácil, profe... pues dos!
-¿Dos huesos?...
-¡Ahhh..., eran huesos?

Borrachera

Un borracho andaba por la calle quejándose: 
—Qué vida, hip, tan arrastrada la mía, hip. Así pa qué vive uno, hip… ¡quisiera, hip, que se abriera la tierra, hip, y me tragara!”. 
En esas se fue por una alcantarilla sin tapa, y –cuando iba hacia el fondo– alzó las manos gritando: -“¡Mentiiiras, mentiiiras…! ¡yo era charlando”.

¿Amigos?

Estaban dos borrachos en un bar de la 5.ª y uno le dice al otro:
-Mira, yo hice el amor tres veces a mi mujer antes de casarnos... ¿y tú?
-Yo también, pero no sabía que se iba a casar contigo.

El humor de "Ogil"

La madre de dos chicos, al regresar de la reunión de padres de familia donde estos estudian, le entrega las calificaciones a su esposo. Este toma las del menor de siete años, y furibundo grita: "¿Qué es esto?: uno en aritmética, dos en geografía, uno en historia, dos en lenguaje...". Se para, se suelta el cinturón y enciende al chico a correazos. Si la mamá no se lo quita hasta lo mata. Luego coge las del mayorcito de 15 años, las abre delante de él, y le sermonea: "¿Qué es esto, jovencito?: uno en matemáticas, uno en geografía, uno en historia, uno en lenguaje, uno en ciencias, y cero en disciplina. ¿Qué es lo que piensa usted de la vida? ¿Qué va a ser de su futuro, ah...? ¡Póngale cuidado al estudio para que sea un hombre de bien!". Cierra las calificaciones, y sale. El pequeño –en un rincón– sigue llorando, y le reclama al hermano:
—¿Y usté que peldió más matelias, mumumummm, polque no le pegalon, y a mi casi me matan, mumumummmmm?
Y el grande le responde:
—Es que usted no solo es mal estudiante, sino que es un tonto: ¿usted no sabe, hermanito, que mi papá es agente de tránsito? ¡Yo no fui bobo...: yo, en las calificaciones, le metí un billete de cien.

A juicio

Nanito, a los nueve años, comparece ante el tribunal acusado de violar una niña de 15. En plena audiencia, el juez le pregunta a la abogada:
-¿Qué puede decir a favor de su defendido, doctora?
La abogada le baja los pantalones a Nanito, le coge el pipí, y -sacudiéndolo- se lo muestra al magistrado.
-¡Mire el tamañito que tiene, señor juez! ¿Cómo van a cusar a este niño de semejante delito?  ¡Mírelo! ¿Usted cree que con una cosita tan pequeñita se puede violar una mujer?
Y Nanito le dice al oido:
-Doctora, no me lo siga sacudiendo que… ¡perdemos el juicio!

El humor de "Ogil"

Una  muchacha con el papá:
—Papi, papi..., ¡me voy a casar!
—No, mija. Primero tienes que estudiar, y aprender a ser gente.
—Nooooo, papi..., yo aprendí hacer gente... ¡ya tengo tres meses de embarazo!

Del "Arriero"

Se encontraba mi amigo, el "Arriero" de Marquetalia, en la plaza de San Pedro, cuando el papa Francisco dio su primer saludo al público anunciándoles:
-Amados, hijos en Jesucristo; muchos cambios vamos a tener en nuestra Iglesia, para empezar y dado el modernismo de este siglo, de ahora en adelante podréis hacer tu confesión por la internet...
Y grita el "Arriero":
-Antonces qué, ¡ecelentísimo"parcero"!, ¿la comunión nos la mandan... por Servientrega?

Prohibición

Estaba Nanito en cine viendo una película pornográfica; y al cabo de 10 minutos de entrar, sale corriendo y un amigo le pregunta:
-¿Por qué saliste corriendo?
Y el chico responde:                       
-Es que mi mamá me dijo que si alguna vez veía películas de mujeres desnudas me iba a volver de piedra, y... ¡ya empecé a ponerme duro...!

Incendio

Dos trabajadores de la construcción preparaban  un asado cuando uno de ellos se empezó a quemar. El otro se quitó la chaqueta y empezó a pegarle con ella para apagarle el fuego. El que se estaba quemando gritaba:
-¡Dejame quemar..., dejame quemar...!
-¿Por qué, si trato de salvarte?
-¡Dejame quemar, o... saca el martillo de la chaqueta!  

¡Empeodó!

En un hospital la enfermera boquinche dice:
- Famidiades ded señod Fednández, se des infodma que tenedmos ploblemas...
Se le acerca la esposa, y dice: ¡No me joda!...
Y contesta la enfermera:
- No mejoda pedo nada, ni mejodó, ni mejodadá, podque... ¡se mudió!‎​​

Al pie de la letra

El esposo regresa de misa, entra a la casa corriendo y se dirige a la esposa.
Con una gran sonrisa la abraza, la levanta tiernamente en sus brazos y danza con ella en el aire alrededor de todos los muebles de la casa.
─Pero, ¿qué es lo que dijo el padre en el sermón?, le pregunta ella. ¿Acaso dijo que los esposos tenían que ser más cariñosos con sus esposas?
─¡Nooooo! -contesta el marido. El padre dijo que teníamos que cargar nuestras penas con alegría y júbilo.

Viejo malicioso

En la alcoba, el anciano susurra al oído de su esposa:
─Mijita, mi amorcito, ¡estoy sin calzoncillos!…
─¡Ay, duérmete tranquilo!... ¡mañana te lavo unos!

Experiencia

Primera noche de una pareja de recién casados. Cuando se van a la cama, ella le dice al novio:
─¿Sabes, mi amor? ¡no te lo había dicho, pero yo no sé hacer nada de nada!
El novio le responde:
─No te preocupes, linda: tú te desnudas, te relajas sobre la cama y... yo haré el resto.
Ella le dice:
─No, mi cielo, eso lo hago perfectamente…, lo que no sé hacer es lavar, plancha cocinar…

Anécdota de "Majitus"

Una mujer muy melosa y sensual, me invitó a su apartamento, ya sentado en la sala, me dijo:
-Espérame aqui, papito, voy al baño a asearme un poco, me maquillo, me pongo mi baby doll, luego paso a la cocina y te preparo una bebida afrodisíaca, me meto en la cama y...
Lo único que pude decir, fue:
-¡Yo mejor vengo otro día!... ¡cuando estés más desocupadita!

El humor de "Ogil"

Mi médico de cabecera, casado con una pediatra, tiene mellizos de cinco años. Uno de los chicos amaneció un día con el penecito endurecido, y –muy asustado– le dice  a la mamá: 
—¡Maaa-mi, maaa-mi!… ¡se me puuu-sió duuu-lo, duuuuu-lo! 
La médica –para tranquilizarlo– le explica: 
—No te preocupes, hijo. Lo que sucede es que el pene tiene dos cuerpos cavernosos o cámaras a las que –a veces– les llega sangre que lo hace agrandar y ponerse firme. Pero... no te asustes, mi amor. Eso es pasajero, y…  ¡rápido se te cae! 
Y el chino le dice: 
—¡Nooo…, maaa-mi! Es que... ¡yo no quieee-lo que se me caaai-ga…

En el hospital

Una enfermera boquinche dice:
-Famidiades ded señod Fednández, se des infodma qued señod ha muedto ahoda en da tadde.
Se le acerca la esposa, y dice: ¡No me joda!...
Y le contesta la enfermera:
-No mejoda, pedo nada, ni mejodó, ni mejodadá, podque... ¡se mudió!‎​

"Majitus" en tren

Iba yo en tren –de Barranquilla a Medellín– con una borrachera tremenda y con urgencia de llegar a tiempo a mi destino. depronto miré a mi lado y alli estaba una preciosa dama, con unas "pechonalidades", ¡tremendas!, y en sus brazos llevaba un bebé.
Media hora despues, la señora muy tranquila, sacó uno de sus senos y trató de alimentar al niño, pero este no quería y lloraba frecuentemente. La señora, ya desesperada, le grita al niño:
-¡Te tomas el desayuno, o se lo doy a este señor!
Y yo tragaba saliba...
Media hora después, vuelve a alimentar al niño y este con mucho llanto, lo rechaza. La señora le dice:
-¡Bueno... te lo tomas, o se lo doy al señor!
Y yo… tragaba más saliba.
Unas horas después, vuelve la señora a sacar sus preciosos pectorales y el culicagao nada que quería, y ella le dice:
-¡Definitivamente, este desayuno se lo voy a tener que dar a este señor!
Yo –ya desesperado– le grité:
-¡Señora, decídase, pues, si pa’l niño o pa mí; porque yo me tenía que bajar enMedellin, y... ¡ya vamos llegando a Manizales!

¡Ay..., "Majitus"!

Siempre he querido tener un auténtico par de botas texanas, así que cuando vi un par en la tienda las compré y me las puse para ir a casa.
Taconiando orgullosamente entré a la cocina y le dije a mi mujer:
─¿Ves algo diferente en mí?
Ella me miró de arriba a abajo y dijo:
─¡No..., absolutamente nada!
Muy frustado, corrí al baño, me quité toda mi ropa -hasta mis calzoncillos de cabritas-, volví a la cocina completamente desnudo y con las botas puestas, nuevamente le pregunté a mi mujer con voz un poco más alta:
─¿Notas algo diferente ahora?
Ella levantó la mirada y dijo con la mayor indiferencia:
─Mira "Majitus", belleza: ¿cuál es la diferencia? ¡Está colgado hacia abajo hoy, estaba colgado así ayer y estará colgado así mañana!
Furioso le grité:
─Y..., ¿sabes por qué está colgado hacia abajo?
─No..., no tengo idea. -Respondió ella-.
─¡Está colgado..., porque esta mirándo mis botas nuevas!
Sin levantar la vista, ella respondió:
─¡Deberías haber comprado un sombrero, "Majitus", un sombrero!


Los maravillosos años 60

Inicio este recorrido por los años 60, con tres personajes que hicieron historia en aquella inolvidable época: Óscar Golden, Amor es..., y Topo Gigio.

Los maravillosos 60...

                                  
Había una manera muy tierna de expresar nuestros sentimientos, sobre todo para los que éramos muy tímidos. El robarnos un verso de un poema era tal vez una cursilería; pero de la imaginación de una artista de Nueva Zelanda, Kim Grove, nos vino –en 1960 y como caída del cielo– una solución: aquella parejita desnuda que conocemos como Amor es… (Love is…)

Examen


En un examen de zoología, el profesor le entrega a Nanito una pata de ave y le dice:
─A la vista de esta extremidad, ha de decirme la familia, el género y la especie del animal, así como sus costumbres migratorias.
─Pero maestro..., ¿cómo le voy a decir todo eso con solo ver una pata?
─Esta usted reprobado. Dígame su nombre y apellido jovencito.
Nanito se quita un zapato, le enseña el pie desnudo al profesor y le dice:
─A ver, profe…, ¡adivine, adivine!

Y eso... ¿pa qué?

Una dama ve el canal Gourmet, y el esposo le dice:
─¿Para qué ves eso, si no sabes cocinar? 
Y ella contesta:
 ─Tú ves canales porno,  y… ¡yo no te digo nada!

Prohibido comer...


Va un tipo al dentista para hacerse una higiene bucal, total que ya finalizada la limpieza, le dice el dentista al cliente:
─Mire, hoy no vaya a comer por el centro.
Y le dice el paciente:
─No se preocupe, hoy voy a comer a casa de mi cuñado.

Con testigo y todo…


Una mujer va entrando a un motel con su amante, y en eso ve saliendo a su esposo con otra, y ella sin titubear le grita: "Te agarré, ¡desgraciado! Gracias a Dios... ¡traje un testigo!

A la sombra de…


La mujer le dice al marido:
─Mi amor, tienes la barriga como árbol de cementerio.
─¿Y cómo es eso, mija?
─Pues…, ¡dándole sombra a un muerto!

Escondidijo...


La esposa le dice a su marido:
-Estoy decepcionada: llevamos tres años de casados, y ya ni siquiera me buscas..
-Pues… ¡andá a esconderte!

¡Pero ya, es ya...

Estela, mi esposa, en diciembre, andaba de rumba con sus primos los mellizos, entraron a una tienda, pidieron un celular alquilado y unas cervezas. Un poco enlagunados, uno de los mellizos cogió el teléfono y –bien fuerte– empezó a decir: "¿Ya mataron ese desgraciao de Alonso? ¡Cómo que no!… ¡Maten ese sinvergüenza!… Que cuando lleguemos, ya hayan matado ese malnacido. ¿Entendíste? ¡Ah... y  lo queman! ¿Te quedó claro?". 
El dueño del negocio cayó en shock, les pidió que salieran de la tienda; no les cobró las cervezas que se habían tomado, y... hasta les dijo que se llevaran el celular. Los tres salieron de la tienda preguntándose por qué el señor había reaccionado de ese modo; pues ellos solo llamaban a la finca insistiendo que mataran Alonso… ¡el marrano que engordaban para el 24! 

¡Y… con qué?

Un abuelo caminando por las calles, en la zona roja de Nueva York, y una prostituta le grita:
─¡Eh, abuelo…, ¿por qué no entras?
El abuelo le contesta:
─¡No, hija, ya no puedo!
La muchacha le grita de nuevo:
─Y… ¿si probamos?…
El abuelo entra, y funciona como un toro, sin descansar un instante.
─¡Uf, basta!... –dice la prostituta. ¡Y dices que ya no puedes!
El abuelo le responde:
─¡Ay, mijita, hacerlo si…, ¡lo que no puedo es pagar!

Con amigos así...

Una dama, muy excitada, le dice a su esposo:
─Mi amor, ¡amárrame, y haz lo que más te gusta!
Él hombre la amarró, y... ¡se fue a beber con sus amigos!

Vida sencilla

Te daré una vida sencilla
Con las cosas que el hombre olvidó,
sin alfombras pero con sonrisas
y los ojos elevados al sol.

Lo mejor de la vida es gratis 
no hay problema teniéndolo a Dios, 
la esperanza será nuestro huésped 
teniendo confianza habrá comprensión.

Yo te ofrezco la brisa de mayo 
los vientos de octubre 
y todo mi amor... 

Volarémos igual que las aves 
en el cielo fronteras no hay, 
a tu piel cubriré con la mía 
y el invierno verano será.

Nuestros sueños serán nuestra casa 
nuestros besos serán nuestra ley, 
por la playa corriendo descalzos 
por la vida juntos vamos a jugar 

Dios a puesto la dicha en lo simple 
y ese es el camino…,  a la felicidad.
                                  Facundo Cabral

Anatomía patológica

INFORME:
Estimado Sr Gil:
Tenemos buenas noticias para usted, la mancha rosada en su pene, no era gangrena, sino lápiz labial.
Atte El equipo de patología.

P.D Lamentamos la amputación.

De compras

En un almacén de ropa femenina:
—Busco un regalo para mi esposa…
—Claro, "Majitus": ¡Tengo unas tangas divinas! Si quiere se las muestro...
—¡Bueno! ¡Pero, primero..., véndame el regalo!

Muestras para laboratorio

Un señor de edad avanzada va al médico a una revisión anual acompañado por su anciana esposa. Cuando el doctor entra a la sala de exámen le dice:
─Voy a necesitar su muestra de orina, de materia fecal y de esperma…
El anciano que estaba medio sordo le pregunta a su mujer:
─¿Qué quiere el doctor?
La mujer le susurra al oído:
 

¡Que le dejes... tus calzoncillos!

"Ogil" De viaje

Mientras mi hermano Óscar empacaba maletas para un viaje de trabajo, su hijo de tres años estaba encantado jugando en la cama. En un momento el niño le dijo:
—¡Mila e’to, papi! –y paró dos deditos de su mano.
Tratando de entretenerlo, Óscar le cogíó los deditos, se los metió a la boca, y le dijo:
—¡Me voy a co-mer es-tos de-diiiii-tos...! –y, dramatizando que se los tragaba, salió del cuarto.
Cuando regresó, el chico estaba parado en la cama mirándose con expresión de asombro los deditos que mi hermano –lleno de ternura– había humedecido con los labios; por lo que le preguntó:
—¿Qué pasa, hijito?
Y el pelado le respondió:
—¡Papi, papi!, ¿qué she hizho mi moquito, ahhh…?

¿Ocupado?

Estaba solo en el apartamento y una hermosa vecina golpea la puerta. Al abrir ella me dice:
─Estoy con unas ganas locas de divertirme, emborracharme y otras cosas más... ¡toditita la noche!, ¿tienes algún programa?
─¡Claro que no!
─¡Qué bueno!... Entonces, ¿puedes cuidar mi perrito?

Cansado

Una viejita le dice a su esposo: 
- Mijito, subamos al segundo piso, y hagamos el amor. 
Y él, algo cansado, le dice:
 

- Elige una de las dos cosas... ¡no puedo hacer las dos!

Experiencia

Primera noche de una pareja de recién casados. Cuando se van a la cama, ella le dice al novio:
─¿Sabes, mi amor? ¡no te lo había dicho, pero yo no sé hacer nada de nada!
El novio le responde:
─No te preocupes, linda: tú te desnudas, te relajas sobre la cama y... yo haré el resto.
Ella le dice:
─No, mi cielo, eso lo hago perfectamente…, lo que no sé hacer es lavar, plancha cocinar…

Al pie de la letra

El esposo regresa de misa, entra a la casa corriendo y se dirige a la esposa.
Con una gran sonrisa la abraza, la levanta tiernamente en sus brazos y danza con ella en el aire alrededor de todos los muebles de la casa.
─Pero, ¿qué es lo que dijo el padre en el sermón?, le pregunta ella. ¿Acaso dijo que los esposos tenían que ser más cariñosos con sus esposas?
─¡Nooooo! -contesta el marido. El padre dijo que teníamos que cargar nuestras penas con alegría y júbilo.

¡Abuelo!

Un chico jugaba con su abuelo en el jardín, y en un movimiento brusco el pelao cae al suelo y se quiebra un dedo de la mano. 
El abuelo lo lleva a la clínica, y allí el médico lo examina:
 
─Su nieto tiene quebrado el dedo –le dijo el médico-, mire como parece una gelatina. Le voy a mandar esta pomada y se la untas todas las noches.
 
A los dos días, el abuelo regresa a casa de su nieto y pudo ver como el dedo del chico estaba tan derechito y duro, gracias a la pomada.
 
El abuelo –maliciosamente– le dice al chico:
 
─Saaa-bes quéee…, Jaaai-mito, teee doooy ciiin-cuenta miiil peee-sos pooor la miii-tad de eeesa pooo-mada.
 
─¡Listo, agüelito!
 
Al día siguiente el abuelo le entrega docientos mil pesos al chico.
 
─Agüelito, pero si sólo eran cincuenta…
 

─¡Síii, miii-jito, peee-ro el reees-to teee looos maaan-da tuuu aaa-buuue-lita!

¿Mieeeee-do..., yooo?

Va caminando un vampiro por la calle y encuentra un niño, y le dice:
─¿Te doooy mie-dooooooooo...?
Y el niño contesta:
─No, glaaa-cias, ¡ya…, ya…, ya teeen-go!

El lechero

Un marido le dice a su mujer:
─Fíjate si es fanfarrón el lechero, dice que se ha acostado con todas las mujeres de este edificio, menos con una…
Y dice la mujer:
─¡Claro, debe ser la orgullosa esa del tercer piso!

De colección

Entramos con mis hijos a un restaurante. Al traernos la cuenta, el mesero le arma tremendo escándalo a mi esposa:
─Señora, por favor, ¡devuelva el tenedor que se guardó en el bolso!
Mi señora –indignadísima– vocifera:
─¡Atrevido! ¡Respete! Yo soy una distinguida mujer. Además, no tengo necesidad de una cosa de esas. ¡Esto es una infamia! en nuestra casa tenemos cubiertos finísimos, y muy elegantes… ¿Cierto, mijo? –se dirigió a mi hijo menor.
 
Y éste respondió:
─¡Sí, mami! Y... ¡de mejoles lestaulantes!